Muchas personas, entre las que me incluyo, vemos cómo la situación económica cada vez es más grave y cómo las cuentas sudan (y mucho) para que nosotros, los hijos, podamos seguir con nuestra educación.
Y yo me pregunto, ¿por qué como sistema para aliviar los gastos de material escolar, como son los libros, no los reutilizamos? Me explico: cada niño dejaría al final de curso sus libros en el colegio y si estuviesen en buen estado recibiría un cheque con el cual podría recoger los libros del nuevo curso, libros que habrían dejado otros niños.
Sé que libreros, editores y de más no estarán de acuerdo con mi plan pero ¿y lo que se ahorraría?
Con este sistema los gobiernos y nuestras familias ahorrarían y dejarían de tirar kilos y kilos de papel a la basura como si los libros fuesen de usar y tirar.
En estos tiempos de crisis más vale pensar en medidas que no llegar a fin de mes.
Bego Meabe, Basauri (Bizkaia)
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